- Porque consideramos al paciente como un ser individual (físico, mental, anímico).
Desde la visión de la Medicina Integrativa, consideraos a cada paciente como un ser individual, distinto, con características personales que requieren una acción terapéutica ajustada a éstas y a su situación (constitución, situación anímica, momento de su desarrollo, entorno familiar o escolar..)
Esto hace que, frente a un mismo proceso patológico, tengamos que matizar el tratamiento, dependiendo de nuestro paciente, a diferencia de la aplicación de protocolos de forma sistemática.
- Porque trabajamos favoreciendo la capacidad curativa del organismo.
Es un concepto básico que el organismo tiende a la salud y que, frente a un elemento agresivo de de desequilibrio, se desarrollan reacciones fisiológicas que intentan contrarrestar o eliminar esta agresión (una de ellas es, por ejemplo, la fiebre).
Los medicamentos y recursos terapéuticos que usamos en medicina integrativa tienen como objetivo reforzar estas reacciones curativas del propio organismo, trabajando sobre los sistemas orgánicos, de forma que estos procesos sean eficaces y alcancen su objetivo, que es la recuperación de la salud.
Esto no excluye que, en caso necesario, tengamos que actuar sobre un elemento etiológico concreto, como puede ser una bacteria, con la farmacología habitual.
¿Qué beneficios obtendré con la medicina integrativa?
El beneficio es poder utilizar todos los recursos terapéuticos que estén al alcance de los profesionales del equipo, tanto las propias de la medicina natural, homeopatía, medicina antroposofica, terapias energéticas etc., como la farmacología moderna, en caso necesario.
Por un lado, trabajamos, como ya hemos explicado, sobre el paciente, sus circunstancias y su capacidad curativa. Y, por otro lado, podemos actuar sobre una causa de tipo infeccioso, quirúrgico, … con todo lo que la medicina moderna nos ofrece.
Es decir, tenemos un efecto de SUMA de las distintas posibilidades terapéuticas.
Dra. Cordón Torrell, Adriana
Pediatría